miércoles, 8 de mayo de 2024

Noticias. El Rincón del Papel

¡Qué ilusión hace ver tus libros en el escaparate de una librería! Algo que no se disfruta todos los días. 😁 Y además, en buena compañía, con mi compañera de AEBAK (@aebarakaldo) Rosana Lenn (@rosana.lenn.autora), y su última novela "Si la luna brilla".

Gracias a Joseba, de la librería "El Rincón del Papel", por apoyar a los autores locales. 
En el @elrinconpapel podéis encontrar todos mis libros. Está en la calle Arrandi, 22 de Barakaldo.


lunes, 6 de mayo de 2024

Buscando inspiración. Esconjuradero


No hay duda de que los viajes son una continua fuente de inspiración. O por lo menos en mi caso así sucede.
Durante la creación de la trilogía "Aurrimar. La leyenda del Dios Errante", fueron tantas las ocasiones en las que utilicé experiencias y recuerdos propios para recrear paisajes, crear personajes o simplemente describir las situaciones más diversas, que ya he perdido la cuenta. Bueno, casi. Por ese motivo voy dejando constancia de ellas en esta sección.

¿Sabéis qué es un "esconjuradero"? ¿Alguna vez habíais escuchado esta palabra? Yo conocí su existencia durante un viaje por el Pirineo oscense. Tras las explicaciones de nuestro guía, supe que debía incorporar tan fascinante elemento al mundo que estaba construyendo.

Los esconjuraderos (del aragonés esconchurar: conjurar) son un elemento arquitectónico característico de la cultura y tradiciones pirenaicas, con fuerte presencia en el Pirineo aragonés. En Castilla y León se los conoce como conjuraderos. Son pequeñas construcciones o templetes que desde el siglo xvi al xviii se levantaron específicamente para albergar rituales destinados a esconjurar o conjurar tormentas o tronadas, las plagas y otros peligros que amenazaban a las cosechas.



Son de geometría simple y precisa, con arquitectura sobria y fría, escasísimos elementos
decorativos y confeccionados con materiales comunes (mampostería, piedra tosca para vanos y cubiertas, losa de piedra o teja árabe). Las paredes pueden alojar vanos de diferentes tamaños, generalmente arco de medio punto. El suelo se unifica con lajas de piedra, ladrillo o cantos rodados, mientras que la cubierta se realiza mediante bóveda esquifada, semiesférica o falsa cúpula.

Suponen una importante muestra y testigo de la cultura pirenaica. La sociedad montañesa atendía los aspectos de la climatología con similares prácticas religiosas que en otros aspectos de la vida cotidiana. Los esconjuraderos configuraban un espacio importante desde el cual el sacerdote y la población invocaban para desviar o deshacer las tormentas o tronadas que pudiesen malograr los campos y cosechas. Es por ello que estas edificaciones se localizan en puntos donde existe una amplia panorámica del horizonte.